Hefesto, el dios del fuego

Hefesto, también conocido como Vulcano, es el artesano, el mago. Sus manos son capaces de crear las más maravillosas joyas, siempre trabajando cerca de los volcanes y ayudado por los cíclopes. Es el protector de los herreros, los escultores y los artesanos. Prometeo robó de su taller el fuego para entregárselo a los humanos.

Es hijo de Hera y de Zeus, pero tiene la desgracia de ser terriblemente feo. Este hecho hace que su propia madre lo precipite del Olimpo, dejándole con una cojera que arrastrará toda su vida.

Vive, hasta los nueve años, en una cueva en lo más profundo del mar, con Eurinome y Tetis, y es allí donde aprende a fabricar pulseras, broches, escudos, armas y todo tipo de joyas, además de autómatas. También es el encargado de acondicionar las mansiones de los dioses.

Pero Hefesto no ha olvidado que su madre le hizo caer del Olimpo, y construye un sillón de oro mágico que deja inmóvil a quien se sienta en él, y se lo manda a Hera. La diosa queda inmovilizada en el trono de inmediato y el resto de los dioses, cuando averiguan que ha sido Hefesto el culpable, le llaman para que regrese al Olimpo y la libere.

Beatriz Moragues - Derechos Reservados